Aún estoy contigo, mi ausente amor.
Soy la nostalgia
que se quiebra como un mar
salado y espumoso...
Me abandoné en tu corazón
perdido farol.
Me callé en tu boca.
Tengo en los labios el sabor
de tu boca.
Tengo el pecho callado.
El corazón está mudo.
Mis ojos están tristes.
Me perdí en ti,
no consigo hallar mi corazón en nadie
que yo quiera amar otra vez.
Sólo supe amarte,
no sabré amar otra vez,
no sabré soñar otra vez,
mis ojos se secaron,
las lágrimas ya no bañan mi pecho.
Estoy solo.
La estrella del alba me saluda,
es madrugada pero no consigo adormecer,
yo te di mis ojos para que me veas,
te di mi corazón para que me amases,
yo no me pertenezco más...
1981/2010 © Z.A. Feitosa, todos os direitos reservados
Bella entrada, llena de ternura, nostalgia y amor, tristes recuerdos, leerte un placer.
ResponderExcluirSaludos
RMC
Depois de se amar realmente, nenhum outro amor parece ter lugar...os olhos secam, o peito morre e seremos para sempre dessa pessoa...
ResponderExcluirLindo o poema!
Abraço
Me he sentido agua resbalando entre estos versos...
ResponderExcluirAún estoy contigo, mi ausente amor.
Soy la nostalgia
Uff me encantó.
Precioso poema y con mucha dulzura.
ResponderExcluir... Me callé en tu boca...
!Qué sensualidad!
Saludos.
BELLISIMA OBRA POETA YA TE LO HABIA DICHO, UN SALUDO Y FELICITACIONES.
ResponderExcluirLlego, te leo y disfruto la belleza de tus poemas, un abrazo
ResponderExcluirStella
Un amor cierto, intenso, que vive en el otro..¿sabes? siempre pertenecemos el ser que amamos y si somos correspondidos es la conjuncion perfecta, si no...deja que entre una nueva esperanza a tu alma
ResponderExcluirUn abrazo
Stella
Cuando se ha amado de ese modo, ya nunca más se puede encontrar el amor en otra persona, nos quedamos esperando que vuelva, y si ha muerto, esperando que la muerte nos lleve a él. Me gusta mucho tu poesía, gracias por pasar por mi blog, aqui estaré para disfrutar de tus versos
ResponderExcluir